Educación financiera desde pequeños

Educación financiera desde pequeños

Compartir es bonito

¡Hola! Hoy os quiero hablar de un tema que me encanta: la educación financiera. Los que me seguís hace tiempo y me seguís por redes como Instagram donde os cuento más de mí, sabéis que estudié la Licenciatura en Administración y Dirección de empresas y que no hace mucho hice el Máster de profesorado de Secundaria, Bachillerato y FP en la especialidad de economía y empresa.

La educación económica y financiera no es algo de adultos. Es algo de la vida diaria. Algo que te afecta cuando compras un piso, o cuando compras una barra de pan. Para tener adultos que sepan valerse por sí mismos en el terreno económico, hay que aprender desde pequeños. No le vas a explicar a un niño de 6 años qué es déficit público, pero es que hay adultos que tampoco sabrían definirlo. O la diferencia entre TIN y TAE y casi todos han formado préstamos.

La educación financiera y económica se puede ir trabajando y aprendiendo desde pequeños, adaptándose a la edad en cada momento. Bien sea dando ejemplo, explicando decisiones del día a día como al hacer la compra en el supermercado o al darles su paga.

Aproximadamente se calcula que el 25 por ciento de los adolescentes no tienen ningún tipo de noción relacionada con las finanzas. Por si fuera poco negativa esta cifra hay que sumar otra que es si cabe más alarmante: según la CNMV, más del cuarenta por ciento de los ciudadanos españoles no saben exactamente lo que es la inflación.


Ello evidencia lo necesario que llega a ser el hecho de dar una buena educación financiera. Y ya de paso, aprovecho para reivindicar la necesidad de apostar en los institutos por la educación en economía. Os animo a buscar el hashtag #economiaenandalucia por Twitter o Instagram. También lo hay para muchas más comunidades y es que quitar la economía es un gran error, y nos va llevar a generaciones de jóvenes sin ningún conocimiento económico. Cosas tan básicas como saber qué pone en tu nómina o contrato de trabajo, qué conceptos vienen en la declaración de renta y qué son los tramos, las deducciones o mínimos, que si queremos montar nuestro propio negocio, tener una idea mínima para hacer una previsión realista.

Y volvemos a los más pequeños…

Hasta los 11 años e incluso más, la mente de los niños mente actúa como una especie de esponja, absorbiendo absolutamente todos los conocimientos que se les impartan, aunque para ello deben aplicarse una serie de claves en las que profundizaremos más adelante.

Beneficios de la educación financiera infantil

Enseñarles todos los entresijos del sector financiero, especialmente el de tipo personal, da pie a que en un futuro puedan llegar a tener una posición económica mucho más favorable. Así lo demuestra el ahorro. Un niño que no aprende los conceptos esenciales sobre el ahorro tendrá menos tendencia a reservarse una parte del dinero en un futuro, por lo que ante el posible surgimiento de una adversidad monetaria se verá incapaz de hacer frente a ella sin recurrir a créditos ofrecidos por entidades prestamistas, las cuales exigen abonar elevados porcentajes de intereses.

Precisamente hablando de este tipo de empresas, así como de los bancos en general, es innegable que muchos adultos toman decisiones de carácter financiero sin estar bien informados sobre lo que conllevan. No nos referimos al simple hecho de leer el contrato y su respectiva letra pequeña, sino también a comprender cada cláusula.

Teniendo en cuenta que el sector financiero cada vez presenta una mayor cantidad de complejidades, a día de hoy es más importante si cabe educar a los más pequeños de la casa. De esta tarea se encargan parcialmente en el colegio, pero es esencial que los padres también lo hagan. Y como os decía, si siguen eliminando horas en materias económicas, ni eso.

Linda niña asiática jugando con monedas haciendo montones de dinero, niño ahorrando dinero en una alcancía, en un frasco de vidrio. niño contando sus monedas guardadas, niños aprendiendo sobre el concepto futuro. Foto gratis

Consejos para educar financieramente a los niños para que sepan ahorrar y administrarse

Son muchos los padres y las madres que se muestran dubitativos a la hora de dar comienzo a este tipo de educación, ya que el tema financiero es un tanto delicado y puede resultar complicado para los peques. Pero de verdad que es posible enseñarles adaptando cada cosa en su momento.

Por ejemplo. Una cosa fácil de explicar es el ahorro. Yo les doy a mis hijos una paga mensual. A algunos les parecerá grande y a otros ridícula. Cada uno que les de la paga que estime conveniente. Yo les doy 1€ por cada año que tienen. Ahora mismo, 8€ y 11€. Puede parecer poco, pero es para caprichos. Lo que necesiten del día a día, se lo compro yo. Y si me apetece algún capricho, se lo compro. Pero lo que ellos quieran, tienen que pagarlo de su paga. Luego, cuando vienen los abuelos le dan 5€, o la bisabuela. Los solemos ver una vez al mes o cada mes y medio porque no vivimos en el mismo lugar.

Pues bien, ellos saben que con ese dinero no pueden comprar nada grande o caro. Así que suele guardar 2 o 3€ en una hucha o monedero aparte y lo ahorran para caprichos más caros. El resto, para un sobre de cartas el viernes al salir del cole o algo así, les da de sobra. Normalmente cuando tienen 10 o 15 euros cada uno ahorrados, lo juntan todo y se compran algún juego de la Nintendo en común. Les he enseñado a comprar precios, por lo que buscan por internet en varios sitios o en Nintendo Online por si hay ofertas. Dejan ese presupuesto guardado y cuando sale la oferta, se lo compran.

Parece una tontería, pero aprenden a administrarse, a ahorrar, a comparar precios, a no comprar impulsivamente el primer juego y a ser responsables económicamente hablando. Y se han comprado bastantes juegos de la Nintendo, libros y juegos de mesa ya.

Otras ideas son enseñarle los precios cuando vais al supermercado, ver si han subido de precio algunos productos que ellos suelan elegir, o cosas básicas del días a día. Poner una paga extra a modo de ayuda extra en casa, de cosas que no suelan hacer. Por ejemplo, si me ayudas a limpiar la terraza o el coche, te doy X€. Obviamente, no va a ser por recoger sus cosas, o llevar el plato al fregadero.

Os animo a ir hablando de estas cosas con ellos, porque de verdad que lo entienden estupendamente y es sentar las bases de una buena educación financiera.

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *