Marta esperaba impaciente la fiesta de su cumpleaños. Ese día cumplía 4 añitos. Su madre le había puesto un vestido con una tela rosa preciosa. Todo estaba preparado: mantel, globos, tarta… ¡¡oh, oh!! Todo no, ¡faltaban las velas!
Buscaron las velas por todos los rincones de la casa, por los cajones y hasta debajo de los cojines. ¡Parecía como si un duendecillo invisible se las hubiese llevado! Las bebidas se calentaban, el chocolate se quedaba templadoy los amigos estaban a punto de llegar.De repente, apareció su abuela por el salón y dijo: “¿Pero, qué pasa? ¿Se ha perdido algo?”
Marta contestó nerviosa: “Sí, ¡no encuentro mis velas!”
Su abuela comenzó a reír y dijo: “ ¡Toda una casualidad! Mira lo que he encontrado sobre el baúl de los juguetes”
A Marta se le iluminaba la cara al ver sus pequeñas velas a la vez que sonaba la puerta. Ya estaban aquí!
Moraleja del cuento:
- Niños, hay que ser más organizados…lo digo por experiencia.
- Una abuela es un tesoro.
Muy bueno el cuento.. y qué tensión por si aparecían o no ..jejejeje.. la moraleja lo mejor 😉
Me encanta el cuento y la moraleja
Jajaa que razón tienes! Muy bueno 😉
Buen domingo
http://Www.historiasdepitufines.com
Jajajaja, es que hoy va dedicado a las abuelas!!!
No sé a ti, pero a mi siempre me pasa que pierdo las velas. Y eso que todas las pongo en el mismo sitio. Pero basta con que compre unas nuevas, para que desaparezcan.
Me encantan el cuento y que tú misma nos indiques las dos moralejas.
Cada día valoro más la dedicación de las madres
Un abrazo
Gracias. Me voy a poner colorada!!
Qué bonito microcuento! Creo que me voy a animar a participar, parece divertido!